9 de noviembre de 2014

Latinoamérica resiste



VICTORIAS PROGRESISTAS EN LAS ELECCIONES PRESIDENCIALES DE BOLIVIA, BRASIL Y URUGUAY 

A pesar de las campañas de desprestigio que sufrieron los candidatos oficialistas a presidentes de Bolivia, Brasil y Uruguay, la coherencia de los pueblos permitió que el proyecto de Patria Grande se siga consolidado. Los medios masivos, como nunca, estuvieron en la vanguardia aliados a sectores políticos opositores con objetivos decididamente desestabilizadores.  

Por Marcelo J. Levy 

El  triunfo en Brasil y Uruguay de la continuidad de las políticas latinoamericanas, junto con la aplastante victoria de Evo Morales en el Estado Plurinacional de Bolivia, han venido a confirmar una perseverante tendencia política que se hace cada vez más determinante en todo el continente, en detrimento de la supremacía de los sectores conservadores locales, vinculados a las políticas de Washington. 

Lo que ha caracterizado a los presidentes electos fue, entre otras cosas, mantener su identidad  y respeto por los principios democráticos y caminar junto a los intereses populares.

Las reelecciones de Evo Morales y Dilma Rousseff, así como el triunfo en primera vuelta de Tabaré Vázquez significaron también victorias sobre el golpismo mediático. Los medios concentrados llevaron adelante campañas de desprestigio sin precedentes. La mentira y el ocultamiento eran el denominador común. Inventaron calumnias, silenciaron permanentemente los avances sociales de los gobiernos. 

El caso más claro fue la tapa de la revista “VEJA” de gran incidencia y tirada en Brasil, ferviente opositora del Partido de los Trabajadores que lanza a la calle un número “especial”. La salida de la revista es los domingos, pero la semana de las elecciones se adelantaron al viernes con una tapa que rezaba: “Eles sabiam tudo” (Ellos sabían todo), refiriéndose a los presuntos actos de corrupción por parte del gobierno con relación a la petrolera estatal Petrobras. Las páginas interiores del pasquín nada decía al respecto. Sólo era un intento de golpe mediático. 

Anteriormente, en el Mundial de Fútbol Brasil 2014 intentaron crear una matriz de opinión en contra de Dilma por las inversiones en los campos de fútbol detrimento de los brasileños que vivían en pobreza crítica. Si bien existieron críticas al desarrollo apresurado y al desembolso de dinero, junto al desalojo de favelas y barrios marginales, los medios se encargaron de ensalzar grupúsculos que se manifestaban en las calles.

El triunfo de Dilma surgió por los votos de millones de brasileños que  han logrado salir de la pobreza gracias a los programas sociales que han desarrollado, primero, el ex presidente Lula, actualmente la presidenta Dilma Rousseff.

Brasil no es cualquier país en el escenario de la correlación de fuerzas mundiales. Es la más grande potencia sudamericana desde varios puntos de vista: territorial, poblacional, de desarrollo agroindustrial y desde el punto de vista político. Su presencia y participación en el desarrollo de una nueva geopolítica frente al imperialismo yanqui es de un peso específico inestimable. Sin Brasil es inconcebible el proyecto de unidad e integración que tuvo en Hugo Chávez su más destacado impulsor pero que no hubiera podido cuajar sin el pleno apoyo y cooperación de Lula da Silva y todo el peso regional e internacional del gigante suramericano como país más extenso y poblado de América Latina, su principal economía y la séptima del mundo, dotada de gigantescos recursos naturales.

Es evidente que para acometer las trasformaciones que se necesitan, como la reforma agraria y la democratización de los medios de comunicación no basta con las alianzas parlamentarias que le han permitido al PT gobernar hasta ahora. El parlamento está repleto de reaccionarios y corruptos. Dilma lo sabe y por eso se ha comprometido a dar la batalla por una Asamblea Constituyente y una reforma política, que no solo ordenaría la democracia representativa sino abriría las puertas a una mayor participación popular. Esta será decisiva para impulsar las reformas que están pendientes ahora frente a una derecha y una oligarquía  golpistas y desestabilizadoras.

Ahora bien; incluso con la victoria lograda por Evo en Bolivia y la auspiciosa segunda vuelta  del Frente Amplio de Uruguay con mayoría en ambas cámaras, una derrota del PT y su abanderada Dilma Rousseff en Brasil hubiera implicado una verdadera catástrofe para las fuerzas populares de Nuestra América.

El reciente triunfo de los Republicanos en las elecciones Norteamericanas profundiza, aun más la idea de que se vienen años de mayor oposición y resistencia entre el norte y el sur. La continuidad de las políticas progresistas son indispensables para no volver a épocas de verdadero saqueo y expoliación. 

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Resistir es vencer


NUEVOS ESCENARIOS, NUEVAS DISPUTAS: LAS LEYES DE HIDROCARBUROS Y DE TELECOMUNICACIONES. CÓMO SE PREPARA EL GOBIERNO PARA LO QUE VENDRÁ 

Todavía faltan doce meses para entregar el poder, pero el kirchnerismo está tomando sus precauciones para atravesar de la mejor manera el último tramo de su gobierno y, a la vez, beneficiar a algunas empresas y empresarios que le simpatizan. De paso, elucubra planes a futuro para no resignar tanto poder, transformarse en el principal opositor del próximo período presidencial y después regresar victorioso.

Por Marcelo R. Pereyra  

ME ENVOLVERÉ DE HIERRO PARA ENDURECER LA PIEL  

Cuando pierda todas las partidas / cuando duerma con la soledad / cuando se me cierren las salidas / y la noche no me deje en paz / Resistiré, erguido frente a todo / me envolveré de hierro para endurecer la piel / y aunque los vientos de la vida soplen fuerte / soy como el junco que se dobla / pero siempre sigue en pie.   

El kirchnerismo no dejó todavía el gobierno y ya pasó a la resistencia. Está haciendo todos los preparativos necesarios para pasar lo mejor posible el próximo período presidencial, debilitando si es necesario al presidente que asuma en 2015, y retornar triunfante en 2019. Algunos de esos preparativos son los siguientes:   

1) Rejuntar una buena cantidad de jueces y fiscales amigos, sobre todo en el fuero federal, que es el que investiga –o debería investigar- los casos de corrupción. Para tal fin se han asegurado cuatro puestos en el Consejo de la Magistratura y se propone una reforma al Código Procesal Penal que le dé más poder a los fiscales que hoy lidera la procuradora Gils Carbó.Asimismo se piensa designar en la Corte Suprema a un nuevo ministro que sea leal a la causa K, como lo fue el renunciante Eugenio Zafaroni. ¿Será Carlos Arslanián? Como sea, la idea de estas chuscas movidas –Sabrina dixit- es que durante el próximo gobiernono aparezcan todos los días noticias sobre ex funcionarios K enjuiciados por corrupción. Es que con el botarate de Boudou ya tienen bastante. 

2) Minimizar el impacto mediático de los posibles hechos de corrupción que se investiguen en el futuro expandiendo la ya existente red de medios amigos y/o simpatizantes y/o favorecedores, y, simultáneamente, tratar de debilitar a los medios opositores. Van en ese sentido dos medidas tomadas recientemente por la AFSCA: una es esperar indefinidamente el plan de adecuación de TELEFÉ, y la otra fue rechazar el plan de adecuación del grupo Clarín. El argumento aquí es finalizar el mandato de Cristina Fernández con la mejor imagen posible, e ir preparando –por si hiciera falta- una andanada de cañonazos mediáticos destinados al que triunfe en las elecciones del año próximo. 

3) Garantizar un grupete de empresarios amigotes que ayuden a superar lo mejor posible la crisis económica desatada en este último tramo del gobierno. En este contexto deben leerse algúnproyecto de ley e incluso ciertas leyes sancionadas por estos días. Como por ejemplo la negativa oficialista a incluir en el reformado Código Civil el derecho universal e irrestricto al agua. Esta denegación tiene un beneficiario directo: las empresas megamineras que utilizan millones de litros de ese líquido para la extracción de metales.   

4) Evitar que los futuros ex funcionarios K tengan que asumir responsabilidades personales, con su patrimonio, en casos de corrupción comprobada. Con ese propósito modificaron el Código Civil.  

5) Establecer alianzas con otros sectores poderosos para asegurar la gobernabilidad. El caso más evidente es el romance –platónico- entre el Papa y Cristina Fernández: ayer, enemigos irreconciliables; hoy, dos a quererse. Resultado: concesión a los deseos de la iglesia católica en la redacción del nuevo Código Civil, evitando un artículo que pudiera abrir las puertas a la despenalización del aborto. Además, el proyecto de ley despenalizador que se acaba de presentar en Diputados, y que  cuenta con el aval de algunas diputadas K, irá a parar al cajón de los recuerdos, porque  la Presidenta ha dado instrucciones para que no prospere.   

6) Responder a los reclamos por mayor seguridad de importantes sectores de las clases medias y altas urbanas proponiendo una exacerbación punitiva a través del Código Procesal Penal. El gobierno “de los derechos humanos” viene endureciendo su discurso frente al delito y a la protesta social. Esta vez, como cuando Menem, son los migrantes de los países vecinos los chivosexpiatorios a sacrificar en el altar de la sacrosanta seguridad. Si en 1995 el director de Migraciones de Menem, Hugo Franco, había afirmado que el delito en la ciudad de Buenos Aires se había extranjerizado, hoy en día se plantea la expulsión de los extranjeros sorprendidos cometiendo un delito in fraganti. Algo así como reeditar la ley de Residencia de 1902, gracias la cual fueron expulsados sin juicio previo cientos de trabajadores anarquistas y socialistas acusados de causar disturbios con sus reclamos por mejores condiciones de trabajo. La ley volvió a ser usada en 1946: Perón había lanzado una campaña contra el “agio y la especulación” como modo de controlar y regular la comercialización de alimentos, algo parecido a los precios ¿cuidados? de la actualidad. Varios almaceneros españoles fueron acusados de agiotistas y especuladores y mandados de vuelta para la madre patria.  

TODO ESTÁ ATADO Y BIEN ATADO 

En la navidad de 1969 el dictador español Francisco Franco pronunció un discurso en el que aseguró que “todo ha quedado atado y bien atado” al proponer como su sucesor al entonces príncipe Juan Carlos de Borbón. Franco murió seis años después, en noviembre de 1975, y Juan Carlos asumió como rey. Él y todos los políticos de derecha y de izquierda de la época juraron respetar una constitución pergeñada por Franco de acuerdo con su ideología fascista. Cristina Fernández no tiene un delfín a quien traspasarle el poder, pero tiene amigos empresarios a los cuales beneficiar dejándoles todo atado y bien atado a gusto de ellos. De paso, le ata las manos al próximo gobierno en asuntos tan sensibles como las telecomunicaciones y el petróleo. 

En el primer caso, con la ley de telecomunicaciones el gobierno apunta a beneficiar a un solo jugador, que es amigo de la casa. La cuestión tiene su historia: desde 2004 Héctor Magnetto, il capo di tutti le capi del grupo Clarín, fue un asiduo visitante a la quinta presidencial de Olivos, dondecompartió cenas y charlas con don Néstor y doña Cristina. Duranteese tiempo todo fue paz y amor. Hasta que una noche de diciembre de 2007 don Néstor le contó a Magnetto que pensaba incorporar al negocio de la televisión por cable a las empresas telefónicas. A Magnetto casi le da un soponcio. Es que si bien el diario Clarín era la nave insignia del grupo, la vaca que daba la leche era la monopólica Cablevisión, y si las telefónicas se metían en el negocio del cable a la vaca se le iban a secar las ubres. Cuando recuperó el habla, Magnetto vociferó  su oposición lo más alto que le permitió su garganta enferma. Pero Néstor no reculó. Esa fue la última visita a Olivos de Magnetto. Cuatro meses después, el gobierno se quiso apropiar de algunos dinerillos de los productores agropecuarios y sancionó la tristemente célebre resolución 125. Clarín y todos los medios del grupo se opusieron con denodado fervor, y ardió Troya. Todo mal entre el grupo y los k, y para colmo Cobos se les dio vuelta y no pudieron avanzar con la 125. De aquel bardo nació la ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, sancionada en octubre de 2009,  mitad para joder al Grupo Clarín, mitad para favorecer a las telefónicas. El gobierno quiso meter un artículo con esa intención, pero sus aliados de la “centroizquierda” en la cámara de diputados se opusieron, y como los necesitaba para ganar la votación se tuvo que meterese artículo en sus zonas más recónditas. Pero lo queel gobiernosí pudo concretar-pese a los insistentes reclamos del grupo Clarín- fue hacerse el distraído con el desmembramiento de Telefónica y Telecom. Así, a cinco años de sancionada la ley, ninguna de las dos empresas ha presentado sus planes de adecuación. Pero como tarde o temprano lo tenían que hacer, antes el gobierno impulsó esta nueva ley de telecomunicaciones mediante la cual –al fin- una empresa amiga del kirchnerismo podrá transformarse en el nuevo gigante mediático del país. Y esto porque Telefónica de Argentina es controlada por Telefónica de España y porque Telecom de Argentina es controlada por Telecom de Italia. Y ¿quién es el socio mayoritario de la Telecom italiana?

Sí, adivinaste, Telefónica de España.

En el segundo aspecto, el gobierno acaba de sancionar una ley de hidrocarburos que es más entreguista que la aprobada durante el gobierno dictatorial de Onganía. ¿Por qué? En primer término porque no pone ningún límite ni espacial ni temporal a las concesiones. Darle una concesión de 30 o 40 años a una empresa petrolera de un área donde ya se sabe que hay petróleo, implica dársela hasta que no quede una gota de petróleo. En segundo término, la exploración es más cara que la explotación, y la exploración la hace el estado, no las empresas concesionarias que ganan también con la distribución. Cristóbal López, el empresario K, se ha ganado unos pesitos distribuyendo nafta con su cadena de estaciones Oil. En tercer lugar, la ley tiene un bochornoso paquete de exenciones impositivas para las empresas y además no contempla el cuidado del ambiente. De hecho,   la ley viene a llenar la necesidad de convalidar el impresentable acuerdo con la contaminadora ambiental estadounidense Chevrón, firmado el año pasado, para explotar Vaca Muerta. Tan impresentable es que muchas de sus cláusulas son secretas (¿?), incluso para la misma provincia –Neuquén- que lo debe aplicar. En plena oleada privatizadora del menemato la cámara de diputados aprobó la privatización de YPF. En aquella sesión de septiembre de 1992 Oscar Parrilli, diputado por Neuquén y actual secretario general de la presidencia, fue el encargado de defender el dictamen favorable a la privatización. Sintiendo quizás algo de culpa, Parrilli aseguró en su discurso que no tenían que pedir perdón por lo que estaban votando, puesto que la nueva ley iba a “darle oxígeno a nuestro gobierno”, y era un “apoyo explícito a nuestro compañero presidente, es decir, Menem. Saludaron fervorosamente la sanción de aquella ley los gobernadores de las provincias petroleras. La esposa de uno de ellos, a la sazón diputada provincial, se había quejado unos días antes de que “un conjunto de legisladores de la Cámara de Diputados de la Nación, cada uno con sus respectivas razones, vienen obstruyendo la posibilidad de que aquella Ley de Federalización de Hidrocarburos y de Privatización de Yacimientos Petrolíferos Fiscales tenga siquiera su tratamiento en esa Cámara. Como se comprenderá, ninguna argucia reglamentaria debe estar puesta al servicio de retrasar las soluciones que nuestra provincia necesita. Del dictado de esa ley depende hoy el envío de los U$S 480.000.000 y el pago de nuestra parte en la licitación de las áreas ya concretada”. 

Sí, adivinaste, era CFK. 

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Ayotzinapa: La profundidad de las causas justas



EL CRUEL ASESINATO DE 43 ESTUDIANTES SACUDE MÉXICO 

En busca de respuestas fáciles a la tragedia de Ayotzinapa, varios señalamientos se han ido al Guerrero bravo, la guerrilla, la tendencia de los jóvenes normalistas para protestar y, la más amañada, el supuesto vínculo de los estudiantes con el crimen organizado. Este tipo de razonamiento y las superficiales respuestas que genera el porqué Ayotzinapa poseen una característica en común: si el fin que encontraron los estudiantes fue violento, las razones se han de originar en su propia violencia. Confunden causa y efecto. 

Por Tanalís Padilla (desde México)

Pero las movilizaciones nacionales e internacionales han obligado a ir más a fondo. En busca de respuestas profundas son muchos los que han recorrido el espacio de la escuela, han hablado con quienes allí estudian y han conocido a sus familiares. Allí han encontrado un entorno penetrante y multifacético cuya lógica organizativa, dignidad y persistencia es producto de una rica historia de lucha.

Ciertamente existe un Guerrero bronco, pero no aquel implicado por el superficial uso del término que atribuye una esencia violenta a los habitantes del estado. Existen razones históricas que explican la violencia en Guerrero y éstas empiezan con la pobreza y las estructuras de poder que la reproducen. Armando Bartra, en su libro Guerrero bronco (Ediciones Sinfiltro, 1996), hace un recorrido histórico que explica la formación de las redes de poder: los caciques y su apropiación de las ganancias de copreros y cafetaleros, los monopolios industriales, el enorme negocio de las empresas turísticas de Acapulco. Es una riqueza de unos cuantos generada a partir de la explotación de la mayoría.

De allí proviene la violencia: de un sistema que condena la población al hambre, de quienes detentan el poder y hacen uso de la fuerza para mantener lo que ellos llaman orden. Es una estructura que tiene sus raíces en la colonia, persiste en el siglo XIX, y poco cambia con la Revolución. Pero lo que sí se gesta a través de varias generaciones es la voluntad de resistir. De allí el Guerrero bravo cuyos recientes protagonistas fueron Genaro Vázquez y Lucio Cabañas.

En su libro Specters of Revolution (Espectros de revolución), publicado por Oxford University Press este año, Alexander Aviña escribe la historia de los movimientos guerrilleros liderados por Vázquez y Cabañas. El autor apunta: “Ambas insurgencias emergen de un proceso enraizado en la cultura política del campesino, una que se encuentra impregnada de utopías: memorias de fallidas y exitosas rebeliones, de anhelos incumplidos por tierra y democracia local, por revolucionarios martirizados. Aun en su derrota, sostiene Aviña, la lucha genera una constelación de posibilidades, alternativas y visiones, generadoras éstas de un futuro distinto al que impone el presente”.

De estas posibilidades dan cuenta los murales que cubren las paredes de la normal rural de Ayotzinapa. Por eso sus alumnos celebran a Cabañas y Vázquez así como celebramos a nivel nacional a Hidalgo, Morelos, Zapata y Villa. Lo hacen no de una forma estática, como las celebraciones oficiales, sino evocando los vínculos que unen a la escuela con el mundo campesino, con el mundo del cual provienen los propios estudiantes.

Es un vínculo que hace a los normalistas rurales sensibles a la injusticia, reacios a aceptarla. El mismo Cabañas contaba: “Cuando vimos el sufrimiento, muchos de los que nos fuimos a estudiar dijimos: vamos a estudiar, pero para el pueblo”. Estudiar para el pueblo es precisamente un concepto que no se permite dentro del modelo neoliberal; ni, al parecer, estudiar para ganarse la vida y sacar adelante a su familia.

Abel García, uno de los estudiantes desaparecidos, de cuya familia Arturo Cano nos proporcionó un acercamiento (La Jornada, 31/10/14) tenía en la normal de Ayotiznapa la posibilidad de realizar su sueño de ser maestro. La madre de Abel, indígena zapoteca de la comunidad de Tecoanapa, en Tierra Caliente, cuenta que su hijo quería darles a sus padres una vida mejor. Sabe del desprecio que hay para la gente humilde, de quienes, dice, “se cree que no tenemos sentimientos”. Entre lágrimas rememora el día que Abel nació, el día que se fue a la normal y la esperanza que mantiene de volverlo a ver. En sus constantes actos de resistencia, los compañeros normalistas de Abel transforman esas lágrimas en movilizaciones. Muestran que a los pobres no se les puede tratar como si no tuvieran sentimientos.

A la vida de Julio César Mondragón nos acerca Marcela Turati en su reportaje de Proceso (2/11/14, Nº 1983). La crónica nos proporciona la historia de un joven que, en su esfuerzo por ganarse la vida, pasó por distintas instituciones. En Ayotzinapa encontró su mejor posibilidad para estudiar. Con la carrera de maestro, Julio César quería darle un mejor futuro a su hija de dos meses. Esa posibilidad le fue arrancada de la forma más brutal. Su rostro, como escribe Turati, no aparece en las 43 fotos de los normalistas desaparecidos que ahora dan la vuelta al mundo. Julio César fue desollado; fue asesinado la noche del 26 de septiembre. La barbaridad del crimen que sufrió alimenta la voluntad de resistencia de sus compañeros.

La presencia de los asesinados y desaparecidos normalistas se hace viva en Ayotzinapa. Uno ve allí no sólo sus nombres, rostros y las butacas que debían ocupar, se encuentra también con los cultivos y las flores de cempasúchil que ellos ayudaron a sembrar. En su reportaje sobre el espacio agrícola de la normal de Ayotzinapa, Sanjuana Martínez (La Jornada, 2/11/14) nos describe las precarias condiciones en que se mantiene la granja y milpa de la normal. Pero en ese pequeño espacio agrícola vemos también la persistencia del campo, un verdadero milagro considerando la política del gobierno que tras décadas ha logrado estrangular la vida campesina. Las milpas y granjas de Ayotzinapa son un pequeño ejemplo del original proyecto que dio vida a las normales rurales; muestran la visión de sus arquitectos, quienes concebían el acceso a la educación y la reforma agraria como ejes imprescindibles del proyecto revolucionario.

En busca de la subversión se encuentra el orgullo de ser parte de una tradición de lucha; en busca de aventurismos se encuentra una dignidad indígena y campesina; en busca de ligas con el narco se encuentra a jóvenes deseosos de ganarse la vida de una forma honesta.

En 1964, cuando los estudiantes de las normales rurales de Saucillo y Salaices, junto con la normal del estado de Chihuahua, se movilizaban en apoyo a las luchas campesinas, el gobernador los declaró comunistas y a sus escuelas, nidos de agitadores. “Yo tengo deseos de saber qué cosa es comunismo –declaró entonces un estudiante–. Dicen que somos agitadores rojillos, ya que no tienen otra palabra para las demandas justas.”

¿Hasta cuándo se seguirá sin una concepción de lo que es la justicia?  

http://www.jornada.unam.mx   

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Máximo progreso para el salario mínimo



ELECCIONES EN ESTADOS UNIDOS 

Las elecciones en Estados Unidos dependen sobre cualquier otra cosa del dinero; mucho dinero, que proviene cada vez más de fuentes “oscuras”, imposibles de rastrear. Sin embargo, la historia no está hecha de dinero sino de movimientos. La holgada victoria republicana en las elecciones legislativas de esta semana ha sido ampliamente descrita como una ola, un baño de sangre, una paliza. Más allá de la hipérbole, más allá de las declaraciones de los comentaristas políticos, fuertes corrientes están en movimiento, cambiando lentamente nuestra sociedad. Uno de los movimientos que logró visibilidad en medio de la maraña electoral es el que tiene como demanda principal un aumento del salario mínimo, el cual se impuso aún en algunos de los estados más conservadores. 

Por Amy Goodman y Denis Moynihan (desde Estados Unidos)

En contra de las tendencias partidarias, los votantes de Alaska, Arkansas, Nebraska y Dakota del Sur aprobaron iniciativas de leyes para aumentar el salario mínimo, como lo hicieron los votantes de San Francisco y Oakland, California. En Illinois y en varios condados de Wisconsin, estados que eligieron gobernadores republicanos, importantes mayorías aprobaron iniciativas no vinculantes para aumentar el salario mínimo. Dado que los republicanos (y algunos demócratas) en el Congreso han bloqueado insistentemente un incremento del salario mínimo nacional, el pueblo está tomando el control del tema en sus comunidades y consiguiendo un apoyo rotundo en todo el espectro político.

El salario mínimo federal es de 7,25 dólares la hora, que con el ajuste por inflación es menor al de 1968. Esto se traduce en un salario de poco más de 15.000 dólares al año para alguien que tenga un trabajo a tiempo completo, quedando por debajo del umbral de la pobreza para las familias de dos personas. Por último, el Presidente Barack Obama ha hecho del aumento del salario mínimo un objetivo central de su presidencia. El pasado mes de febrero emitió una orden ejecutiva que obligó a las empresas que trabajan bajo contratos federales a pagar a sus empleados un mínimo de 10,10 dólares la hora porque, según dijo en su discurso del “Estado de la Unión” dos semanas antes: “Si cocinas para nuestras tropas o lavas sus platos, no deberías tener que vivir en la pobreza. Por supuesto, para mayores logros, el Congreso debe participar. Así que les pido que se unan al resto del país. Digan que sí. Denle un aumento a Estados Unidos”.

Ralph Nader, el legendario defensor de los consumidores y ex candidato presidencial del Partido Verde, ha luchado por un aumento del salario mínimo durante años. Nader acompañó a “Democracy Now!” en la cobertura especial de las elecciones legislativas de mitad de mandato de 2014 y vinculó los malos resultados de los demócratas con el hecho de no haber atendido el tema del salario mínimo: “A último momento asumieron el único tema que el sitio de noticias Politico.com afirmó que podría favorecer a los demócratas: el aumento del salario mínimo para 30 millones de estadounidenses que actualmente ganan menos que los trabajadores de 1968, si hacemos los ajustes por inflación. 30 millones de personas y sus familias, un montón de votantes, pero no le dieron la importancia que merecía el tema. Hace unas tres semanas y media le dije al Senador Harry Reid que este debate tenía que ser llevado al plano nacional por el presidente en una campaña por todo el país. Él estuvo de acuerdo y dijo que iba a llamar al presidente. Pero ¿qué logramos? Un presidente que pasó casi dos semanas en los salones de Nueva York, Maine, San Francisco y Los Ángeles recaudando fondos para los demócratas en lugar de hacer campaña en el país con un tema que tiene un 80% de apoyo. Hasta los ex candidatos a presidente republicanos Mitt Romney y Rick Santorum se manifestaron a favor de actualizar el salario mínimo”.

Nader comentó particularmente una de las contiendas más seguidas de la noche, la elección del senador por Arkansas, donde el demócrata Mark Pryor perdió el escaño que ocupaba ante su rival republicano Tom Cotton: “Una vez que ingresó al Senado, el Senador Mark Pryor se aseguró de darle la espalda a los grupos de ciudadanos, a los grupos liberales, los grupos progresistas. Estuvo a cargo del Subcomité de Asuntos del Consumidor y no pudimos ni siquiera conseguir una reunión con él. Los demócratas han dejado de lado las posturas económicas que les hicieron ganar las elecciones una y otra vez a Franklin Delano Roosevelt y Harry Truman. Ya no pueden defender a nuestro país de los programas más militaristas, corporativos y crueles, de las políticas en contra de los trabajadores y los consumidores, en contra del ambiente y de las mujeres e, incluso, en contra de los niños”.

Arkansas, donde se encuentra la sede del empleador privado más grande del mundo, Wal-Mart, en realidad tiene el salario mínimo más bajo del país: 6,25 dólares la hora, más bajo incluso que el mínimo federal de 7,25 dólares la hora (en estos casos, los empleadores están obligados a pagar el mínimo federal). Allí, la iniciativa para el aumento del salario mínimo se aprobó con más del 65% de los votos.

La coalición Give Arkansas a Raise Now (Por un aumento del salario mínimo en Arkansas, en español) trabajó arduamente durante meses para lograr este resultado, y es solamente una de las coaliciones regionales que se ocupan de llevar este tema al electorado porque el Congreso se niega a asumirlo como prioridad.

Los trabajadores también están haciendo demandas directas a sus empleadores, con una campaña cada vez mayor entre los trabajadores de la industria de la comida rápida, que están exigiendo 15 dólares la hora. En manifestaciones coordinadas, realizadas en 150 ciudades el pasado mes de septiembre, más de 400 personas fueron detenidas en actos de desobediencia civil no violenta.

Imara Jones, colaborador de Colorlines.com, escribió que las elecciones de medio término de 2014 estarían marcadas por la falta de justicia económica y comentó el tema en la cobertura especial de las elecciones que hizo Democracy Now!

“La justicia económica estuvo presente en las elecciones nacionales en todos los aspectos. Antes que nada, en términos de participación de votantes se está hablando de apatía, pero la apatía es una elección. La decisión de no votar es una elección, y dada la situación económica y la falta de progreso y equidad económica, no es una decisión extraña. No debería sorprendernos para nada. Este es uno de los primeros aspectos importantes; la gente no acudió a las urnas, particularmente las comunidades que sufrieron el peor golpe de la economía: afroestadounidenses, mujeres solteras y jóvenes menores de 30 años son quienes no se presentaron y quienes fueron más afectados por la economía. No tienen opción.” De hecho, solo alrededor de un tercio de los ciudadanos habilitados para votar acudió a las urnas, con una participación muy baja entre los jóvenes menores de 30 años, las mujeres solteras y las personas de color.

La iniciativa popular en demanda de un salario mínimo justo es tan solo uno de los movimientos sociales que crecen día a día en Estados Unidos. El movimiento por los derechos de los inmigrantes, el movimiento por una reforma carcelaria y del sistema de justicia penal, el movimiento contra el cambio climático inducido por la humanidad, o contra la guerra sin fin son movimientos que inspiran a la acción, que conducen a las personas a las calles, a menudo arriesgándose a ser arrestadas, o incluso deportadas. A pesar de las apariencias tras las elecciones legislativas de este año, la gente es una fuerza más poderosa que el dinero.  

http://www.democracynow.org/es 

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